*
Me reconozco esclava del tiempo,
verduga de mis instintos,
jueza absoluta de mis actos.
Sólo necesito la forma de conjugarlo,
dosificarlo, y así llegar a ser lo que pretendo.
Pero nada es fácil y mis pretensiones exigentes.
El orden aniquila,
la muerte espera sola
sentada planeando su juego.
Sorprende y luego todo es irremediable
¿Que hacer para salvarse? Olvidar...
**
A orillas del océano del pensamiento
hallé una idea,
la alimenté de ilusiones y esperanzas,
la alojé en mi corazón herido,
me ayudó a encontrarle sentido a la vida.
Jamás voy a olvidarla.
Viví por ella.
Soñé por ella.
Una vez fortalecida
la hice poner de pie y caminar.
Le pedí que llegara lejos,
más lejos de lo que yo podía llegar.
Le pedí que uniera lazos,
salvara vidas,
y caminó,
vivió sin mi ayuda,
se alejó completamente de mí,
voló sin mi ayuda,
creció y se expandió.
Una tarde de abril yo dejé de respirar,
pero ella voló más alto, sobre los cielos,
buscándome sin poderme encontrar...
Me reconozco esclava del tiempo,
verduga de mis instintos,
jueza absoluta de mis actos.
Sólo necesito la forma de conjugarlo,
dosificarlo, y así llegar a ser lo que pretendo.
Pero nada es fácil y mis pretensiones exigentes.
El orden aniquila,
la muerte espera sola
sentada planeando su juego.
Sorprende y luego todo es irremediable
¿Que hacer para salvarse? Olvidar...
**
A orillas del océano del pensamiento
hallé una idea,
la alimenté de ilusiones y esperanzas,
la alojé en mi corazón herido,
me ayudó a encontrarle sentido a la vida.
Jamás voy a olvidarla.
Viví por ella.
Soñé por ella.
Una vez fortalecida
la hice poner de pie y caminar.
Le pedí que llegara lejos,
más lejos de lo que yo podía llegar.
Le pedí que uniera lazos,
salvara vidas,
y caminó,
vivió sin mi ayuda,
se alejó completamente de mí,
voló sin mi ayuda,
creció y se expandió.
Una tarde de abril yo dejé de respirar,
pero ella voló más alto, sobre los cielos,
buscándome sin poderme encontrar...
2 comentarios:
Muy lindo lo que escribe tu sobrina.
Saludos
Profundo y Vertical.
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